El Ojo Revelador: Escapada de encantos portugueses

Agosto es el mes de vacaciones, por lo menos, de las mías. Por eso no podía faltar una escapadita para seguir descubriendo lugares del mundo y fotografiarlos. No hace falta hacer un viaje “a lo grande” ni ir muy lejos para poder disfrutar de las vacaciones de verano. A veces, y sobre todo cuando el presupuesto está más ajustado, una escapada cercana y en buena compañía puede resultar ser, además de muy divertido, un viaje inolvidable.

Lisboa. Alba Castillo 2013

Alba Castillo 2013

De los destinos europeos y cercanos que tenía en mente visitar durante mi verano, decidí escoger Lisboa y Sintra, lugares vecinos a los que no había ido aún, razón por la cual ya era hora de hacerles una visita.

Quizás uno de los rasgos que más llamen la atención de Lisboa son sus aires alicaídos, que llegan a tener su encanto en algunos rincones de la ciudad. Rincones como ciertas callejuelas, los tranvías, o las plazas que años atrás han albergado actividad política y económica y que ahora permanecen intactas para traernos al recuerdo la vida de antaño. Rincones como el barrio de Alfama, al que encuentro similitudes con el Albaicín de Granada en sus gentes, sus calles, los artistas callejeros...

Pero no siempre esa decadencia trae consigo encanto en la ciudad, por lo menos, bajo mi punto de vista. Si bien es cierto que es uno de los principales atractivos de la ciudad, también creo que el grado de abandono de ciertas zonas es bastante alto para una capital europea como es Lisboa. Algo parecido ocurre en Malta, salvo que a Malta la salvan sus preciosas playas.

No obstante, son muchos los lugares bonitos y emblemáticos que se pueden ver en la capital portuguesa, además de los diferentes planes para hacer, del que destaco como obligado ver una actuación de fado con una buena cena y un buen vino. Yo tuve la oportunidad de ir a uno, en el Barrio Alto, la zona más bohemia y alternativa de la ciudad, aunque siendo sincera, hablando de alternativo, me quedo con Haight-Ashbury, el barrio bohemio de San Francisco (EEUU). Eso sí, si quieres salir de noche o tomarte unos mojitos, ¡éste el sitio!

Tampoco hay que dejar de visitar el barrio de Belem, donde está la mayor parte de las atracciones turísticas: Monasterio de los Jerónimos, la Torre de Belem, o el Padrão dos Descobrimentos; además de museos muy interesantes. ¡Y no olvidar probar uno de los famosos pasteles de Belem!

Lisboa. Alba Castillo 2013

Después de unos días en Lisboa y tras llegar a Sintra, me di cuenta que quizás hubieran sobrado días en el primero y faltado en el segundo, y es que Sintra me impactó nada más llegar. Igual que la ciudad de Brujas (Bélgica) está sacada de un cuento de hadas, Sintra tiene la misma fama. Lo encantador de este pueblecito, además de sus edificios y casas “encantadas”, es la pura naturaleza, la pura tranquilidad, en fin, la pura vida. Si tu plan es descansar y pasar unos días de relax, olvídate de la gran ciudad lisboeta y adéntrate en los verdes paisajes de Sintra y respira naturaleza. Viaje con olor a campo…viaje con olor a naturaleza viva.

Mis lugares favoritos: el Palacio da Pena y Quinta da Regaleira. Y si además subes hasta el mirador de la Cruz Alta, desde donde se puede divisar el Palacio, date por satisfecho :)